Por Guillermo Hernández Acosta
El festejo depende del patrón, pero al final de la jornada de trabajo.
Este día que se celebra a la santa Cruz, son precisamente los trabajadores de la construcción los que la celebran, pero lo hacen trabajando normalmente, llegan a temprana hora y se disponen a acatar las instrucciones del responsable o “maistro” de la obra.
A cada albañil o aprendiz de este oficio se le va inculcando está tradición de que a temprana hora se debe de tomar dos maderos, cortarlos y después clavarlos hasta crear una cruz perfecta que van decorando con papel de diferentes colores, lo importante es que será la que los cuide durante toda la construcción.
Para los trabajadores de la construcción, el día de la cruz es una fecha para agradecer los beneficios recibidos todo el año, lo primero es la salud y el trabajo, porque con ello se garantiza llevar el alimento a la mesa de su familia.
Después de cumplir con el trabajo, corresponde al patrón o al responsable de la obra, reconocerles el trabajo con una comida y después sin poder faltar algunas cervezas o algo más fuerte dependiendo la sed de cada trabajador.
En diferentes puntos de Tecpan, los trabajadores de la construcción señalaron que a temprana hora acudieron a la iglesia donde se ofreció una misa para pedir por salud y mucho trabajo.