Familias que se dedican a esta actividad deben salir a ofrecer el condimento.
Guillermo Hernández Acosta
La comunidad de las Salinas ubicada a unos 30 kilómetros de la cabecera municipal de Petatlán se distingue porque la mayoría de las familias que ahí viven se dedican a la producción y venta de sal y a finales del año pasado cuando el nivel de la laguna baja la producción de este condimento se eleva considerablemente, incluso las familias han registrado una mayor cantidad a comparación de otros años.
La cosecha es de manera artesanal y las familias se ven en la necesidad de ofrecer sus productos en otros municipios como Zihuatanejo, la Unión en lo que se refiere a la industria hotelera y restaurantera, como el caso de la familia Lobato que registró un alza en la producción.
Eduardo Lobato, productor de sal de mar señaló que actualmente cuentan con una producción de 800 costales de sal de 60 kilogramos casa uno y para poder vender el producto deben salir junto con su familia a recorrer las zonas comerciales y de esta manera poder vender el condimento.
“Tenemos algunos pedidos en la industria hotelera y restaurantera, pero es insuficiente, es mucho la sal la que tenemos e incluso echamos mano de las redes sociales para ofrecer el producto por costales o kilos depende el cliente” dijo.
Al paso por está comunidad que se ubica a la orilla de la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, es común observar la venta de este producto confiando los pobladores que estos primeros meses del año puedan vender bien porque el tema de la pandemia les ha pegado bastante fuerte.
