Por Eduardo Salgado Sánchez
Este viernes 13 de diciembre de 2024, se conmemora el 503 aniversario del descubrimiento de la Bahía de Acapulco por los españoles, que fue bautizada como “Santa Lucía”.
En los anales de la historia de Acapulco, se destaca que tras la conquista de Tenochtitlán, la capital azteca, en agosto de 1521, Hernán Cortés inició la exploración del territorio de la entonces Nueva España.
También datos de la web indican, que uno de los objetivos principales, era encontrar un punto entre los océanos que sirviera para llegar a las ahora conocidas como islas Molucas, un archipiélago de Indonesia que en el siglo XVI se le denominó islas de las Especias debido al gran número de plantas aromáticas de la zona. A partir de entonces, las islas se convirtieron en un punto estratégico del comercio de especias entre Asia y América.
Al frente de esta expedición, Cortes designó a Francisco Álvarez Chico, quien siguiendo rutas conocidas por comerciantes y recaudadores de tributos, llegó un 13 de diciembre de 1521 al puerto de Acapulco y nombró a la bahía Santa Lucía, siguiendo la costumbre del santoral católico que honra ese día a “Santa Lucía de Siracusa”.
Se dice que los exploradores españoles, quedaron maravillados con la bahía, por ser un espacio perfecto para descarga de mercancía de barcos, por la profundidad de sus aguas.
El resto es historia, ya que debido a la condición única de la bahía, se derivó el arranque de la ruta comercial Asia-España a través de La Nueva España, siendo “El Galeón de Manila”, mejor conocido como La Nao de China, el buque que estableció un extraordinario intercambio comercial y cultural.