Juan José Romero

Chilpancingo,  24 de octubre del 2021.- De seguir dependiendo en un 96 por ciento de la federación, Guerrero no se va a lograr el desarrollo económico que requiere; por lo que se necesita una reforma fiscal integral que permita una recaudación más efectiva señalo el  presidente del Consejo de Cámaras Industriales y Empresariales de Guerrero (Concaingro), Julián Urióstegui Carbajal.

El líder empresarial planteo la necesidad de revisar las estrategias de recaudación, de tal manera que sea más eficiente esa tarea al ampliar la base de contribuyentes de todos los sectores productivos de la entidad, privados y públicos, “que paguen sus impuestos todos los que tienen que pagarlos, y no solo un reducido porcentaje como sucede hasta ahora”.

Mencionó que esa medida permitiría a Guerrero en 2023 pasar del 4 al 8 por ciento de los ingresos propios del total del presupuesto que se ejerce cada año en la entidad, “sí es posible incrementar en un 100 por ciento los ingresos propios”, aseguró.

Aclaró que esas acciones deberán ir de la mano con eficientar el gasto público y transparentarlo, tarea que ya exige y vigila la propia sociedad, y a la que están obligados los entes fiscalizables.

Urióstegui Carbajal mencionó que esa propuesta va a ser presentada a los legisladores, para que al interior del Congreso Local se de la discusión, y confió que será aceptada por los diputados, “que se de una discusión de  altura, en donde los legisladores de todas las fuerzas políticas busquen los consensos y permitan transitar a una reforma fiscal de gran calado”.

El presidente de Concaingro, que agrupa a 32 cámaras empresariales, consideró que los municipios también deben involucrarse en la estrategia de recaudación, de esa manera dejarán de ser una carga fiscal para el gobierno del estado y les permitirá avanzar en su autosuficiencia.

El modelo económico de Guerrero es el mismo desde hace por lo menos 30 años, lo que a consideración del líder empresarial mantiene a Guerrero como uno de los estados con menor ingreso propio, muy lejos del 23 por ciento de Chiapas, el 33 por ciento de Oaxaca o el 72 por ciento de Nuevo León.

Dijo que esa amplia dependencia que mantiene a esta entidad suriana en un estado paternalista en los 81 municipios, y el sector privado no escapa a ese paternalismo, asegura Julián Urióstegui, empresario constructor, quien menciona que la informalidad rebasa el 77 por ciento, y hay una amplia base de contribuyentes que “evaden la formalidad y el pago de impuestos”.

Ejemplificó la oferta extra hotelera de Acapulco, que se calcula en unos 40 mil cuartos que evaden sus contribuciones, mientras que solo 18 mil cuartos de la hotelería formal si paga impuestos, “si ya saben cuántos son los informales y donde están, solo se requiere alinearlos y que paguen sus impuestos correspondientes”, sugirió.  

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