Enfoque Informativo

  • El Sumo Pontífice pidió a la gente ver hacia el futuro y mantenerse caminando al frente; por otro lado, advirtió que la pornografía “debilita el corazón”

El papa Francisco continuó con su ciclo de catequesis sobre el discernimiento, describiéndola que también conlleva una parte “afectiva” que es la desolación, durante la Audiencia General celebrada la mañana de este miércoles en la Plaza de San Pedro.

El Sumo Pontífice utilizó las palabras de San Ignacio de Loyola que la define como “Oscuridad del ánima, turbación en ella, moción a las cosas bajas y terrenas, inquietud de varias agitaciones y tentaciones, moviendo a infidencia, sin esperanza, sin amor, hallándose toda perezosa, tibia, triste y como separada de su criador y señor”.

Dijo que todos la han “experimentado” a lo cual subrayó que “hay que saber leerla”, ya que esta sensación “tiene algo importante que decirnos”.

“Es importante aprender a leer la tristeza. Todos conocemos qué es la tristeza: todos. ¿Pero sabemos leerla? ¿Sabemos entender qué significa para mí, esta tristeza de hoy? En nuestro tiempo, la tristeza está considerada mayoritariamente de forma negativa, como un mal del que huir a toda costa; sin embargo, puede ser una campana de alarma indispensable para la vida, invitándonos a explorar paisajes más ricos y fértiles que la fugacidad y la evasión no consienten”, afirmó.

El Santo Padre habló que la desolación es muchas veces una prueba de un momento importante.

“Si sabemos atravesar soledad y desolación con apertura y conciencia, podemos salir reforzados bajo el aspecto humano y espiritual. Ninguna prueba está fuera de nuestro alcance; ninguna prueba será superior a lo que nosotros podemos hacer”.

Advierte que la pornografía “debilita el corazón”

Por otro lado, cuestionado sobre el uso de redes sociales, el pontífice aprovechó para advertir contra el consumo de “la pornografía digital”.

“Cada uno de ustedes, piensen si han tenido la experiencia o la tentación de la pornografía digital. Es un vicio que tiene mucha gente, tantos laicos, tantas laicas, e incluso sacerdotes y monjas”, señaló el papa.

“Es algo que debilita el alma. El diablo entra por ahí: debilita el corazón del sacerdote. Y no hablo de la pornografía criminal, como el abuso infantil, sino de la pornografía ‘normal'”, explicó.

Cabe destacar que el papa ha condenado en varias ocasiones la pornografía, la última vez en junio.

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