Enfoque Informativo
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El color de la flor de terciopelo simboliza la espera o el luto
En los altares para el Día de Muertos destacan distintos tipos de flores. La más popular es el cempasúchil; sin embargo, hay una que destaca por su bello color y textura: la flor de terciopelo, también conocida como mano de león, espinaca de lago o cresta de gallo.
Pero de dónde proviene y cuál es su significado en estas fechas.
Muchos no lo saben, pero esta bella flor pertenece a un género de plantas comestibles llamado Celosia, que forma parte de la familia Amaranthaceae.
Estas flores se caracterizan por ser de una textura suave que se asemeja a la tela del terciopelo, de ahí su nombre.
Aunque son muy características de México, se cree que su origen es asiático. Actualmente se cultiva a nivel mundial, incluyendo Sudamérica y en África tropical.
Aunque en países de África, como Nigeria, suele consumirse como alimento, en nuestro país es imprescindible para decorar las ofrendas y tumbas para el Día de Muertos.
El motivo para usar flor de terciopelo es, principalmente, ornamental, aunque no debemos olvidar que cuenta con un color muy especial que contrasta y, en efecto, posee un significado importante para esta celebración: un tono que varía entre el fucsia y el morado.
Este color tiene un trasfondo religioso, tanto en las culturas prehispánicas como en el catolicismo, en el cual simboliza la espera o el luto.
Recordemos que la ofrenda del Día de Muertos actual es fruto de un sincretismo entre la cultura prehispánica y los elementos católicos.
El color morado lo podemos encontrar en estas flores, al igual que en el papel picado y otros elementos decorativos como manteles.
Cabe destacar, que las flores, además, sirven para honrar la memoria de aquellos que ya se fueron, y a los vivos nos recuerdan que la vida es perenne.