Por Alejandro Ortiz

El alcalde afirmó que los vecinos no pueden revertir la instalación del basurero municipal, pues se tratan de “convenios con antelación”

El presidente municipal panista de Chilpancingo, Gustavo Alarcón Herrera, dijo desconocer la inconformidad que existe por parte de vecinos del poblado de Matlalapa, municipio de Tixtla, por la instalación de un basurero municipal para Chilpancingo, debido al riesgo ambiental.

Entrevistado en el zócalo de la ciudad, Gustavo Alarcón explicó que los pobladores no podrían detener las acciones por la construcción del basurero, debido a que el proyecto cuenta con todos los requerimientos de ley.

“No pueden, porque esto es parte de convenios y trabajos que hay con antelación, permisos del medio ambiente, permisos de uso de suelo, factibilidad y pues no podría cambiarse”, dijo el edil.

El día de ayer, comuneros de Matlalapa denunciaron que la actual administración municipal de Chilpancingo, pretende continuar el proyecto que dejó la expresidenta municipal Norma Otilia Hernández, a pesar de las afectaciones ambientales.

Entre los efectos adversos que señalan, está la contaminación de manantiales que surten de agua al municipio de Eduardo Neri (Zumpango).

Sin embargo, Gustavo Alarcón consideró que la denuncia de vecinos de aquella comunidad, es por los “cambios” en la administración municipal Por qué anunció que se reunirán con el grupo de habitantes, pero insistió que no podrían revertir la construcción del relleno sanitario, que los vecinos consideran un basurero.