Enfoque Informativo
Una horas después de anotar el gol de la victoria, en la victoria del Paris Saint Germain en el clásico contra el Olympique de Marsella en la liga francesa, Neymar compareció este lunes en el comienzo del juicio en España por presunta estafa y corrupción en su fichaje con el Barcelona en 2013.
Padres de Neymar, los ex presidentes del Barcelona Sandro Rosell y Josep Bartomeu, representantes del club catalán y el equipo brasileño Santos también comparecieron en el juzgado tras la demanda presentada por DIS, un consorcio de inversión brasileño que sostiene que se ocultó el monto real de la transferencia del futbolista.
Con lentes de sol y luciendo un traje negro con corbata, el delantero brasileño llegó al juzgado en Barcelona. El padre de Neymar, quien también ejerce como su agente, fue uno de sus acompañantes.
Los acusados, que han negado haber cometido delitos, se sentaron juntos para escuchar los primeros alegatos de un juicio que comenzó a casi un mes de la inauguración de la Copa Mundial en Qatar, el 20 de noviembre. El juicio debe culminar a fines de octubre.
Neymar se retiró del juzgado un par de horas después sin hablar con la prensa.
El juez que lleva el caso le permitió a Neymar salir más temprano de la sala para que pudiera descansar, ya que había tenido que jugar la noche previa en Francia. Anotó su noveno gol de la actual temporada de la liga francesa, en los descuentos de la primera parte, para que el PSG derrotase 1-0 a Marsella.
Neymar y el resto de los acusados debieron comparecer en el primer día del juicio. Se prevé que el astro tendrá que rendir testimonio durante la semana.
La Fiscalía acusa de fraude al jugador de 30 años y a su padre, pidiendo una condena máxima de dos años de prisión, aunque se prevé que las mismas queden suspendidas.
DIS alega que Neymar y su padre ocultaron el verdadero costo del traspaso del Santos al Barcelona con el fin de no pagarle el monto de dinero que les corresponde por ser propietarios del 40 % de los derechos federativos del jugador.
Reclaman que Neymar y su padre reciban condenas de cinco años de prisión y pagar una compensación de 34 millones de euros (32,1 millones de dólares), además de una multa de 195 millones de euros (190 millones de dólares) que deberá ser pagada al fisco español.
La Fiscalía pretende una multa de 10 millones de euros (9.7 millones de euros) para Neymar y su padre. También pidió cinco años de prisión para Rosell por cargos de fraude y corrupción, además de una multa de 10 millones de euros (9.7 millones de dólares).
La defensa de Neymar sostiene que el delito de corrupción en negocios no es condenable en Brasil, y que ahí es donde la transacción se realizó. Añade que, de acuerdo a la ley española, un delito no puede ser castigado en España sino se cometió en ambos territorios.