Por Alejandro Ortiz

La dirigencia nacional del Movimiento Antorchista pide justicia y encarcelamiento de quien haya ordenado “este brutal crimen”

La dirigencia nacional del Movimiento Antorchista, confirmó que los activistas, Conrado Hernández y su esposa, Mercedes Martínez, fueron asesinados a golpes; su hijo, Vladimir Tlacaélel de 6 años, fue asfixiado hasta su muerte, según las autopsias obtenidas.

En conferencia de prensa en las oficinas de Antorcha Campesina en Chilpancingo, las dirigencias estatal y nacional, denunciaron que los hechos ocurridos el pasado jueves en la carretera federal México-Acapulco, a la altura de Agua de Obispo, no fueron un accidente como trascendió inicialmente.

El pasado jueves, desde las 4 de la tarde, se reportó un presunto accidente carretero en la vía de comunicación federal, el cual fue atendido luego de casi 5 horas. En un barranco fue hallado un automóvil con tres personas muertas, entre ellas un menor de edad.

Un día después, las víctimas fueron identificadas como: Conrado Hernández Domínguez, su esposa Mercedes Martínez Martínez y el hijo de ambos, Vladimir Tlacaélel Hernández, todos activistas de Antorcha Campesina en Guerrero.

En su intervención, el ingeniero Homero Aguirre, Vocero Nacional de Antorcha Campesina, afirmó que tienen la certeza de que se trató de un multi homicidio y no de un accidente; “esa certeza se deriva de un estudio pericial, de una autopsia”.

“La autopsia arroja sin ningún género de duda que nuestros compañeros fueron asesinados, los adultos fueron asesinados a golpes en la cabeza, y el niño, Vladimir, fue asfixia”, indicó Homero Aguirre y retomó que incluso algunos textos periodísticos señalaban la inconsistencia entre lo informado inicialmente, respecto a que fue un accidente, con hechos como que el carro presentaba daños leves y que los cuerpos estaban en la parte de atrás.

“Estamos hablando de un crimen brutal, de un crimen que revela, que exhibe la impunidad y gran peligro que tenemos los mexicanos si no se cambia la manera de conducir a este país y a este estado”.

Por su parte, el diputado federal de Antorcha Campesina, Brasil Acosta Peña, anunció que denunciará desde la Cámara de Diputados que “Guerrero está ensangrentado, está chorreando sangre”.

“No nos debemos acostumbrar a que a la gente se le asesine y se le tire a un barranco”, indicó el legislador federal y exigió una investigación en consecuencia por parte de las autoridades de justicia para detener a los responsables.

En este contexto, las dirigencias estatal y nacional, coincidieron en que los responsables materiales e intelectuales deben ser detenidos y encarcelados hasta el día de su muerte, por lo que solicitarán una reunión con la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, a fin de que haya total respaldó a las investigaciones.

Tras la conferencia, un grupo de antorchistas se traslado al Palacio de Gobierno en busca de un acercamiento con la titular del Poder Ejecutivo; al llegar ingresaron al inmueble para dialogar con autoridades.