Por Juan Manuel Ramírez Mendoza

Estimados lectores, hoy nuestro estado se encuentra enfrentando diversas problemáticas; entre una de ellas se encuentra la falta de turismo que azota hoy al puerto. Lo anterior es derivado de los estragos consecuentes del Covid-19 así como del mal encaminamiento de las estrategias gubernamentales de promoción turística. Es por ello que debe de existir un impulso en 3 ámbitos esenciales para combatir esta problemática, mismos que explicaré a continuación: 

El primero es la adecuada promoción turística del puerto. Con el paso del tiempo hemos visto que los programas destinados a dicha tarea no han logrado atraer el turismo que Acapulco tanto necesita; un claro ejemplo de esto es “Habla bien de ACA”. La falta de promoción turística, y, seamos sinceros las campañas de desprestigio tanto a nivel nacional como internacional en contra de nuestro estado han propiciado el incremento de dicha problemática. El resultado de no priorizar este sector es el decaimiento de ocupación hotelera que vive nuestro estado día con día. Es por ello que los programas se deben encaminar a una agresiva promoción turística especialmente del sector hotelero; ya que si hay un incremento tanto de la ocupación hotelera así como del alargamiento de las estancias habrá una importante derrama económica.

El segundo sector son las tarifas destinadas para el uso de carreteras del estado. Si queremos atraer la mayor cantidad posible de personas que consuman y disfruten de nuestro hermoso estado, debe de plantearse la posibilidad de una disminución de dichas tarifas. Los beneficios derivados de esto serian los siguientes: Primero aumentaría la demanda de carros provenientes de distintas partes de la república incrementando el presupuesto destinado a realizar mejoras en el puerto; segundo se prolongarían las estancias de los “turistas” con el posible impulso del comercio local.

Por último pero no menos importante el sector aeroportuario. Con los estragos del Covid-19 se cerraron líneas de vuelo que eran de especial ayuda al impulso económico del puerto; como eran las aerolíneas “TAR “e “Interjet”; surgiendo una problemática crucial. Primero una disminución de los días hábiles de vuelo para llegar a nuestro puerto; segunda un reducido número de horarios opcionales que en la mayor parte no ajustan los intereses del “turista”; si a esto le agregamos la inflación de los boletos de avión de rutas restantes da como resultado una receta para el caos económico.  Es por ello que las instituciones gubernamentales deberán buscar mayor interacción con las diversas aerolíneas para crear nuevas rutas comerciales para que esto genere una mayor derrama económica.

Es por ello que hago un llamado a las instancias gubernamentales conducentes para que el turismo se vuelva prioridad dentro de nuestro estado, pero una prioridad de acción no solo de palabra, es decir, que realicen estrategias como las anteriormente mencionadas para hacer más atractivo la estancia en nuestro estado y se reactive la economía, porque si algo no hemos entendido es que Guerrero lo tiene todo, pero nosotros somos los que le hemos fallado, llego el momento de demostrar porque fuimos el primer puerto turístico a nivel internacional de México, pero esto no se puede lograr sin la ayuda de todos porque recordemos que el cambio lo hacemos todos. 

Como bien dijo un célebre empresario “No podemos estar en modo supervivencia. Tenemos que estar en modo de crecimiento”.

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