Por: Juan José Romero
Lo que se sirve en las pozolerías de Chilpancingo y en otros lados, técnicamente no es mezcal
Pese a que el mezcal que se produce en Guerrero es considerado el mejor del país, uno de los problemas que enfrenta es que la producción anual, que es de millón 800 mil litros, más del 90 por ciento no está certificada y se vende a granel en los mercados informales; técnicamente no puede llamarse mezcal.
El coordinador del Consejo Estatal del Maguey Mezcal de Guerrero, Carlos Renato Hernández Rodríguez, reconoció que el cambio en la representación del Sistema Producto Maguey Mezcal, en el cual quedó José Jesús Robledo Rodríguez en sustitución de Rigoberto Acosta González, “no fue lo más adecuado ni lo más transparente ni lo más correcto”, expuso.
Mezcal no certificado
En cuanto hace al mezcal que se produce en Guerrero, mencionó que por las características propias del maguey que existe en esta entidad suriana, que es el de hoja o penca ancha, es decir, el Cupreata, el producto es excelente: “Producimos un excelente mezcal, pero el problema es que no se certifica y al no certificarse continúa vendiéndose en los mercados informales y a granel”, recalcó.
En Guerrero dijo se producen un millón 800 mil litros de mezcal por año, aunque de este total, más del 90 por ciento no está certificado.
Detalló que el mezcal tiene denominación de origen, lo que obliga a los productores a que para que puedan sacar su producto al mercado, debe estar certificado: “a eso te obliga la denominación de origen, para lo cual hay un organismo que viene y certifica todo tu proceso de producción y si no lo tienes certificado, no puedes salir a los mercados formales con tu marca, tienes que traer tu registro de certificación”.
Por esta situación, recalcó, “más del 90 por ciento del mezcal que se produce en Guerrero técnicamente no se puede llamar mezcal; todo lo que se toma en las pozolerías de Chilpancingo técnicamente no se puede llamar mezcal porque no está certificado, es decir, si llega Profeco puede decir este no es mezcal, porque no cuenta con certificación; sólo se puede llamar mezcal al producto que está certificado”, insistió.
Aún así, refirió, el potencial que tiene Guerrero en la producción de mezcal “es grandísimo, porque no hay municipio en el estado en donde no se siembre maguey; en Guerrero alrededor de cinco mil familias viven de la producción de mezcal”, enfatizó.
En relación al cambio en la representación de los mezcaleros en el Sistema Producto Maguey-Mezcal, Hernández Rodríguez puntualizó que desafortunadamente “no fue lo más transparente ni lo más adecuado ni lo más correcto; hubo detalles en el cambio”.
Sin embargo, destacó el cambio en el Comité del Sistema Producto Maguey-Mezcal, “que haya nuevas personas; ahora vamos a esperar que los resultados que den sean satisfactorios”, comentó.
No obstante, quienes quedaron en esta organización “empezaron mal porque hicieron declaraciones que no tuvieron que ver con la verdad”, aunque atribuyó esto a la falta de experiencia o novatez del nuevo representante de los mezcaleros, finalizó