Alejandro Ortiz
Luego de que el Comité Directivo Estatal del PRI en Guerrero avalara el método de elección para la nueva dirigencia, el expresidente municipal de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena advirtió que “cuando impongan la dirigencia, habrá fractura”.
En una opinión, publicada en sus redes sociales, el exdirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), manifestó que el partido desechó la elección directa “que en momentos de derrota es la vía más exitosa para unificar, recuperar y descubrir liderazgos nuevos y sobre todo mandar mensaje de renovación a la sociedad y con ello credibilidad”.
Durante el fin de semana el partido acordó por mayoría de votos que la dirigencia será elegida por el Método de Asamblea de Consejeros y Consejeras Políticos, con ello se descarta que sea por elección o encuesta.
Ante esto, Marco Leyva refirió que el partido impondrá la dirigencia con el fin de que las élites se repartan lo único que les quedará en futuras derrotas, es decir diputaciones plurinominales.
“Aquí la militancia no entra. Solo les hará el trabajo para que ellos sean pluris. Cuándo impongan la dirigencia, habrá fractura. Con fractura el PRI no irá unido a la elección, será una simulada organización de muchas porras, gritos y poca efectividad, y por último, perderán la poca credibilidad que les quedaba y con ello se desfondarán en la elección constitucional”.
Al final del texto, el exigente estatal del Revolucionario Institucional aclaro que no se trata de una crítica hacia el partido, sino a las decisiones de las élites “burdas y ambiciosas, sin estar a la altura de su tiempo histórico”.
Esta semana se hará pública la convocatoria para la renovación de la dirigencia del PRI, aunque desde hace un par de semanas algunos personajes han manifestado su interés de llevar la batuta del partido, entre ellos el excandidato a la gubernatura, Mario Moreno Arcos, y el exalcalde de Zihuatanejo, Alejandro Bravo Abarca, a quien se le ha visto cercano de vieja guardia priista.