Enfoque Informativo
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Laura Bozzo pasó más de 80 días en la Casa de los Famosos 2 y por poco logra llegar a la final
La “Señorita Laura” llegará pronto a sus 70 años y desde que salió de la Casa de los Famosos , muchos han querido saber más sobre la vida de la polémica presentadora, nacida el 19 de agosto de 1952 en la población de Callao, Perú.
Madre de Victoria de la Fuente y Alejandra de la Fuente, la animadora ha compartido episodios de su juventud. En algunas imágenes aparece en bikini y mostrando su esbelta figura, que ha conservado con el pasar de los años.
Laura Bozzo pasó más de 80 días en la Casa de los Famosos 2 y por poco logra llegar a la final. Fue eliminada el 1 de agosto.
En el reality Laura Bozzo besó a Luis Potro Caballero en una de las galas, luego de ser eliminada y el momento causó muchas risas en el público.
Laura Bozzo se convirtió en una estrella de la Casa de los Famosos 2, para bien o para mal sus ocurrencias y arrebatos la llevaron a captar la atención del público.
Durante su estancia en la Casa de los Famosos 2, la presentadora hizo varias revelaciones sobre su vida. Contó que fue una hija muy consentida por sus padres, quienes esperaban un varón, pero nació ella.
También confesó, entre otras cosas, que en la escuela sufrió bullying. “Me sentía tan fea, tan fea, me metían al water (cloud), me pegaban chicles, mi madre tenía que acompañarme a la escuela”, recuerdó.
Sin embargo, dijo que en la adolescencia y en busca de aceptación, todo cambió y se convirtió en una versión absolutamente distinta.
Cuenta que comenzó a cambiar todo y hacía todo lo que no se debía hacer. “Empecé a ser la traviesa, la salvaje (…) Ese fue el cambio y la máscara de Laura en América”, comentó.
Por su rebeldía, en un momento de su juventud la mandaron a Venezuela. Allí tuve al novio que más he amado en mi vida, era 35 años mayor que yo”.
Anorexia, depresión y enfermedad
Otro golpe que marcó la vida de Laura fue la muerte de su abuelo. Esa muerte la llevó a caer en la anorexia. Cuando nació su hija mayor, Victoria, le cortaron el intestino al momento de hacerle la cesárea.
“Todo estaba lleno de pus, todo eran tubos por todos lados (…) Estuve en coma, me pusieron los santos óleos y todo mundo pensaba que me iba a morir”.
“Cuando me estaban operando por última vez hay un desplazamiento de mi alma, porque era como que miraba mi cuerpo lleno de pus y de todo, y en un momento dado escuché que tenía una misión, lo cierto es que me salvé y los doctores dijeron que era un milagro”.
La vida de Laura detrás de las pantallas de televisión no ha sido color de rosa: “Tengo una tendencia a la depresión muy fuerte”, confesó.
Laura, nacionalizada mexicana, reveló también que cuando llegó al país parecía “una calavera”, y nadie le quería dar trabajo.
Desde su participación en la Casa de los Famosos, las cosas para Laura parecen estar cambiando. Ella siente que nunca es tarde para volver a comenzar.
